miércoles, 29 de octubre de 2008

¿DE QUE MANERA SIGUES AL SEÑOR?

San Marcos 14: 51-52 “Pero cierto joven le seguía, cubierto el cuerpo con una sábana; y le prendieron; mas él, dejando la sábana, huyó”

La historia bíblica de este pasaje no menciona el nombre propio del joven que seguía a Jesús después de ser arrestado. Pero si sabemos que lo seguía cubierto el cuerpo con una sabana, sinónimo de no querer ser descubierto o de tener temor de que sepan que es un seguidor de El.

Al igual que este joven hay muchos en las Iglesias que siguen a Jesús de lejos, cubiertos con sabanas para no ser descubierto por las personas ya que a lo mejor tienen temor de que sepan que ahora son cristianos evangélicos.

Aquellos que siguen a Jesús de lejos por lo general son personas con débiles convicciones, muchos de ellos solo fueron convencidos, pero realmente no han experimentado un nuevo nacimiento. Esto se debe a que han preferido seguir de lejos a Jesús, pero en esta ocasión te pregunto: ¿Podrás conocer perfectamente a alguien si no estas cerca de el?, para ser sinceros es muy difícil que eso pase, ya que para poder conocer a alguien muy bien se necesita una constante comunión.

Las débiles convicciones de esta clase de personas los llevan a querer esconder su fe, pero yo te pregunto: ¿De que sirve seguir a Jesús si vas a esconder lo que has aprendido de El?

El problema del joven que menciona la Biblia fue que al ser descubierto dejo la sabana y huyo desnudo. La desnudez en la Biblia es sinónimo de vergüenza y pecado. ¿Será que aquellos que siguen a Jesús de lejos esconden bajo la sabana su pecado?

Es momento de entender que no puedo seguirlo de lejos, ni mucho menos escondido bajo una sabana llena de pecado, Dios lo conoce todo, el sabe lo que tratas de esconder, el conoce tu desnudes, entonces ¿Por qué querer esconder algo que El ya conoce?, es mejor ser sinceros delante de Dios y si he estado siguiéndolo de lejos, es momento de comenzar a acercarme mas a El para conocerlo mejor, además la sabana con la que queremos tapar nuestra desnudes no puede seguir ahí, ¿Por qué no pedir perdón por todo aquello que nos da vergüenza?, ¿No crees que es productivo el confesar tu pecado que quererlo esconder bajo una sabana?

Amigo mío, te invito a seguir a Jesús de cerca, puesto que cuando esto ocurra conocerás al Dios que yo y muchos mas hemos podido conocer, ese Dios que es grande en misericordia e inmenso en amor, ese Dios que perdona tus pecados y te reviste de su gracia para que no te avergüences de tu desnudes.

¿Cuánto tiempo esperaras para tratarlo de conocer a perfección?

Autor: Enrique Monterroza

No hay comentarios: