martes, 11 de noviembre de 2008

ATAQUES MENTALES

¿ESTAS PREPARADO PARA LA TORMENTA?

Un joven aplicó para un empleo de obrero en una granja. Cuando el granjero le preguntó sobre sus calificaciones, él dijo: “Puedo dormir cuando el viento sopla”. Esto sorprendió al granjero. Pero como le cayó bien el joven, lo empleó.

Unos pocos días más tarde, el granjero y su esposa fueron despertados en la noche por una violenta tormenta. Rápidamente comenzaron a revisar las cosas para ver si todo estaba seguro.

Hallaron que las ventanas de la granja habían sido aseguradas. Un buen suministro de leña había sido colocado junto a la chimenea.

El joven dormía profundamente.

El granjero y su esposa inspeccionaron entonces su propiedad. Hallaron que todas las herramientas habían sido colocadas en el depósito, libre del efecto de los elementos.

El tractor había sido movido al garaje. El granero estaba adecuadamente bajo llave. Aun los animales estaban calmados. Todo estaba bien.

El granjero comprendió entonces el significado de las palabras del joven: “Puedo dormir cuando el viento sopla”. Porque el obrero hizo su trabajo leal y fielmente cuando los cielos estaban claros, estaba preparado para la tormenta cuando esta vino. Así que cuando el viento sopló, él no tuvo temor. Pudo dormir en paz.

Cuando caminamos en la diligencia, la productividad y la responsabilidad, entonces podemos descansar sabiendo que justo hemos hecho lo que teníamos que haber hecho. Estás siendo responsable donde vive, trabajas o ministras? Entonces..duerme en paz.

Esdras subió de Babilonia. Era escriba diligente en la ley de Moisés, que el Dios de Israel había dado; y le concedió el rey todo lo que pidió, porque la mano de el Señor su Dios estaba sobre Esdras. Esd 7:6

El perezoso ambiciona, y nada consigue; el diligente ve cumplidos sus deseos. Prov 13:4

HOY..QUIERO CAMINAR CON LA FRENTE EN ALTO

Conforme a la fe murieron todos estos sin haber recibido lo prometido, sino mirándolo de lejos, y creyéndolo, y saludándolo y confesando que eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra. Por que lo que esto dice, claramente dan a entender que buscan una patria; pues si hubiesen estado pensando en aquella de donde salieron, ciertamente tenían tiempo de volver. Pero anhelaban una mejor; por lo cual Dios no se averguenza de llamarse Dios de ellos, porque les ha preparado una ciudad” Heb 11:13-16,.
Hoy, no quiero caminar con desconfianza, debilidad e inconsistencia. Con mis ojos puestos en el Señor, quiero caminar con la frente en alto. Si, como los héroes de Hebreos 11, los cuales aunque no recibieron todo lo prometido acá en la tierra recibieron más de lo prometido en el cielo. Pero, mientras caminaron en la tierra ellos lo hicieron con la frente en alto, porque sabían que habían creído en el único y verdadero Dios. Su fe no fue un puente entre ellos y lo que ellos esperaban que Dios hiciera…sino un puente entre ellos y Dios mismo.
El libro de Hebreos 11: 13-16, dice que mientras caminaron en la tierra ellos mantuvieron en su corazón seis cosas sólidas, firmes y profundas en relación a lo prometido por Dios.
Primero : Lo creyeron..
Segundo:Lo Saludaron..
Tercero: Lo confesaron..
Cuarto:Lo demostraron.
Quinto lo Pensaron y.
Sexto: lo anhelaron.
Que gran ejemplo para mi hoy.
Si quiero caminar hoy con la frente en alto, necesito mantener estas seis cosas en lo profundo de mi ser en relación a las promesas de Dios para mi. Necesito primero creerlo….y esto es ..estar persuadido y convencido de lo que Dios ha prometido. Luego, Saludar las promesas…es como abrazarlas..como abrazaría un ser querido y hacerlas parte de mi..luego, Confesarlas con mi boca….Confesar es decir lo mismo que Dios ha dicho…Después, demostrarlo con mi vida..Sí, de nada me sirve confesarlo si con mi manera de vivir digo otra cosa.
Hoy, quiero vivir acorde con lo que confieso con mis labios. Entonces estaré preparado para PENSARLO. SÍ CUANDO lo creo, LO ABRAZO, LO CONFIESO Y LO DEMUESTRO CON MI VIDA…entonces lo podré pensar….lo que pienso termina formando mi vida. Y finalmente….lo anhelaré…El anhelo es el deseo profundo de mi alma.
Cuando los hombres y mujeres de Hebreos 11 mantuvieron estas seis cosas en su corazón, entonces el verso 16 dice que Dios no se averguenza de llamarse Dios de ellos.
Quiero que Dios hoy no se averguence de llamarse mi Dios.
Señor: A veces el camino parece oscuro..pero otras veces está muy claro e iluminado. Pero no importa el camino, lo que me importa hoy es andar por el sendero con la frente en alto. Señor, Esos hombres y mujeres de Hebreos 11. Hoy han impactado mi vida, porque supieron caminar con fidelidad y certeza. Ellos creyeron tus promesas, las saludaron, las confesaron, las demostraron, las pensaron y las anhelaron. Acaso no es esta la mejor lección para mi vida hoy…. Pues quiero vivirla.

ES MAS QUE UN TRABAJO

Un joven muchacho entró apresuradamente dentro de una estación de servicio y le preguntó al encargado si tenía un teléfono público.
El encargado asintió con la cabeza. Seguro, allí está. El muchacho introdujo algunas monedas, marcó un número y esperó la respuesta. Finalmente alguien le contestó. Uh señor, dijo con voz profunda, ¿podría serle útil un muchacho honesto, buen trabajador, para trabajar con usted?
El encargado no pudo evitar oír la pregunta. Después de unos instantes, el muchacho dijo: Oh, usted ya tiene un muchacho joven, honesto y buen trabajador? Bueno, está bien. Igualmente gracias.
Con una amplia sonrisa de oreja a oreja, cortó la comunicación y volvió a su coche, cantando eufóricamente.
Eh, permíteme un minuto, lo llamó el encargado de la estación. No pude evitar escuchar tu conversación. ¿Por qué estás tan contento? Yo pensé que el hombre te había dicho que ya tenía a alguien y no te necesitaba. El muchacho sonrió. Bueno, verá usted, yo soy el muchacho honesto y trabajador. ¡Estaba solamente controlando mi trabajo!

Colosenses 3:23Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres.

EL DIA MAS DEPRIMENTE

Lectura: Éxodo 6:1-9
¡Tened ánimo; Yo soy, no temáis! —Mateo 14:27
Los científicos en el Reino Unido han calculado que el día más deprimente del año se produce durante la tercera semana de enero. Los días de invierno son oscuros y fríos, la emoción de las fiestas ya pasó justo cuando las deudas por Navidad están venciendo y se han roto todas las resoluciones para el Año Nuevo. Las celebraciones, los obsequios, y las buenas intenciones que una vez nos hicieron sentir felices ahora nos deprimen y nos dejan sintiéndonos desesperados.
Hace mucho tiempo en Egipto, el pueblo hebreo puso todas sus esperanzas en que Moisés iba a rescatarles de la esclavitud. Pero esas esperanzas se hicieron añicos cuando las buenas intenciones de Moisés llevaron al pueblo hacia peores condiciones. En vez de ganar la libertad, los capataces que tenían al pueblo esclavizado ejercieron aún más opresión exigiéndoles que produjeras más ladrillos con menos recursos.
Moisés clamó al Señor, «Porque desde que yo vine a Faraón para hablarle en Tu nombre, ha afligido a este pueblo; y Tú no has librado a Tu pueblo» (Éx. 5:23). Lo que Moisés y el pueblo hebreo estaban a punto de aprender es que los planes de rescate de Dios algunas veces no irrumpen sino hasta que parece que toda esperanza se ha agotado.
Si las circunstancias de tu vida parecen estar yendo de mal en peor, enviándote a la depresión y la desesperación, recuerda que Dios siempre escucha y responde a nuestro clamor —pero a Su tiempo, no a el nuestro.
Cuando te sientas desesperado, mira al Dios de la esperanza.