miércoles, 23 de julio de 2008

SALTO OLIMPICO

Cuenta este relato de un joven que fue entrenando para Salto Ornamental a nivel olímpico, la única influencia religiosa que recibió en su vida, le llegó a través de un amigo cristiano. El deportista no prestó mayor atención a los sermones de su amigo, aunque los escuchaba con frecuencia.
Una noche, fue a la piscina de la universidad a la que pertenecía. Las luces estaban todas apagadas, pero como la noche estaba clara y la luna brillaba, había suficiente luz para practicar. El joven se subió al trampolín más alto y a lo que volvió la espalda a la piscina al filo de la rampa y extendió sus brazos, vio su propia sombra en la pared. La sombra de su cuerpo tenía la forma exacta de una cruz. En lugar de saltar, se arrodilló y finalmente le pidió a Dios que entrara en su vida. Mientras el joven permanecía quieto, el personal de limpieza ingresó y encendió las luces. Habían vaciado la piscina para repararla.
Si, yo amo a Jesús. Él es mi fuente de existencia y mi Salvador. Me mantiene funcionando cada día de mi vida. Sin Él, no sería nada. Sin Él, soy nada, pero con Él, “Puedo hacer todas las cosas a través de Cristo que me da fuerzas”
Esta es la prueba más simple que existe, si amas a Jesús y no te averguenzas de las cosas maravillosas que ha hecho El por ti.
Fiipensesl 4:13 “Todo lo puedo en Cristo que me Fortalece”

CON DIOS TODO EL TIEMPO

Lectura: 2 Corintios 5:1-10
. . . si la tienda terrenal . . . es destruida, tenemos de Dios un edificio . . . etern[o] en los cielos. --2 Corintios 5:1.
Fue el verano entre los años segundo y tercero de secundaria de Melissa. Ella y su amiga Mandy estaban en España en un viaje que hizo su clase de español, y una noche se quedaron despiertas hasta tarde en la habitación de su hotel para hablar de temas serios. Acababan de ver un informe de la BBC acerca de unos adolescentes que habían muerto en un accidente, y empezaron a hablar de la muerte.
Melissa dijo a Mandy que no entendía por qué los cristianos tenían miedo de morir. Después de todo, le dijo, cuando un cristiano muere, pasa a estar "con Dios todo el tiempo". ¿Qué podía ser mejor que eso? --se preguntaba Melissa.
¿Cómo sé yo de esta conversación? Mandy compartió esta historia conmigo y con mi esposa poco después de que perdiéramos a nuestra querida hija de 17 años en un accidente de auto en el 2002. Esta historia nos ha consolado, porque nos recuerda que Melissa sabía que era salva, y tenía la confianza de que pasaría la eternidad con su Salvador. Sólo que nunca esperamos que estaría "con Dios todo el tiempo" tan repentinamente y tan temprano en su vida.
¿Tienes tú la seguridad que tenía Melissa de que si fueras a morir estarías en la presencia de Dios para siempre? (2 Corintios 5:6-8). Asegúrate de tu salvación hoy. Así no tendrás miedo a morir.
SI HACES ESPACIO PARA JESÚS EN TU CORAZÓN, ÉL HARÁ ESPACIO PARA TI EN LOS CIELOS.