viernes, 12 de noviembre de 2010

VALOR HUMILDE

Lectura: Filipenses 2:19-30.
"Recibidle, pues, en el Señor, con todo gozo, y tened en estima a los que son como él" Filipenses 2:29
Un reportaje del diario Chicago Tribune decía: «Montones de estadounidenses, desde clérigos hasta abogados y presidentes de compañías, están reclamando medallas al valor que jamás ganaron». La fabricación de registros de guerra y las falsas afirmaciones de valentía están más generalizadas de lo imaginable. Un hombre, que reclamó falsamente una Cruz de la Marina, posteriormente sintió vergüenza y dijo que los verdaderos héroes rara vez hablan de lo que han hecho.
El heroísmo está marcado por un generoso acto de arriesgar la vida en beneficio de otro. En Filipenses, Pablo elogió a dos de sus colegas como verdaderos héroes de la fe. La generosidad de Timoteo y su carácter probado se ganaron el reconocimiento del apóstol como un verdadero hijo que había servido con él en el evangelio (2:22). Y Pablo describió a Epafrodito como «hermano y colaborador y compañero de milicia» (v.25), que arriesgó su vida por la obra de Cristo (v.30).
Pablo les dijo a los creyentes en Filipos: «Tened en estima a los que son como él» (v.29). Honrar a nuestros compañeros de la fe por su desinteresado servicio a Dios es un mandato bíblico. No se trata de la adoración a un héroe, sino de una actitud de respeto por una vida bien vivida.
¿A quién puedes honrar hoy con una palabra de aliento o una expresión tangible de aprecio por su humilde valor al servir al Señor y ayudar a los demás en Su nombre?
La fe en Cristo puede convertir a personas ordinarias en héroes extraordinarios.