martes, 8 de abril de 2008

PASTORES DE HOSPITALET


Estos son los pastores de la iglesa de Hospitalet, Juan Pancobo y su mujer Jiemena

CONOZCO A UNA PERSONA

Conozco a una persona pobre
que distribuye sonrisa.
Conozco a una persona que sufre
que comunica alegría.
Conozco a una persona incomprendida
que sabe comprender.
Conozco a una persona pura
que conquista con mirar.
Conozco a una persona pácifica
que camina brindando paz.
Conozco a una persona bondadosa
que atodos tiene algo que dar.
Conozco a una persona que es perseguida
que sabe perdonar.
Conozco esa persona cuyo secreto es AMAR,
y su nombre es Jesus.

SOLO UNA GOTA DE TU AMOR

Solo una gota de tu Amor, Señor y esta, mi frágil vida se convierte en fuente de bendición.
Solo una gota de tu Amor, Señor y esta "casa espiritual" se transforma día a día en la morada del Salvador.
Solo una gota de tu Amor, Señor y regado sera el "Jardín del alma" con pensamientos dulces, de fragancia grata.
Solo una gota de tu Amor, Señor y las manos no se cansarán jamás de trabajar en la "vida" de mi solo, único Dios.
Solo una gota de tu Amor, Señor fortalecerá los pies cansados que solo para Tí, querrán caminar.
Solo una gota de tu amor, Señor y de los labios brotarán palabras de alabanza y bendición al Dueño de la Creación.
Oh mi buen Señor que pueda con mi influencia alcanzar a quienes necesitan de tu grande e inagotable Amor...!

¿ES TU VIDA TRISTE?

¿Es tu vida triste? ¿Tienes gran dolor?
¿Quieres un auxilio, un libertador?
Aceptando a Cristo, el buen Salvador,
Tu serás un hijo de Dios creador.

¿Muy pesada carga tu llevando estás?
El liviano yugo de Jesús tendrás;
Oye el mensaje de amor sin par,
Para que con Cristo puedas caminar.

¿Por la senda ancha andas tú sin paz?
¿Buscas el camino que feliz te hará?
Solo en Jesucristo tú encontrarás
Salvación eterna, salvación veraz.

EMPUJA LA ROCA

Dios le dijo a su siervo: "Cada día empuja con todas tus fuerzas la gran roca que está junto a la puerta de tu cabaña".

El hombre hizo perseveraba fielmente en lo que el Señor le pidió. Día tras día, antes de ir a sus trabajos, el hombre empujaba la gran piedra con todas sus fuerzas... pero esta no se movía.

Después de muchos años el siervo de Dios aun perseveraba obediente, pero comenzó a sentirse frustrado, pues la roca no se había movido un milímetro. Finalmente le dijo al Señor: "Ya estoy viejo y cada día he empujado la roca, pero esta no se ha movido ¿Por que he fracasado?"
El Señor le respondió con profundo amor: "Querido hijo, cuando te pedí que empujaras la roca no era con el fin de que esta se moviera. Quise mas bien enseñarte a dominar tu cuerpo, a fortalecer tu alma por medio de la disciplina, a conocer tus fortaleza y tus límites. Empujando la roca con perseverancia has aprendido a vencer la tentación del demonio que te decía que era inútil y has fortalecido tu fe. Además, Yo sabía que tus enemigos eran fuertes y vendrían contra ti. Por eso quise que ejercitaras tu cuerpo. Gracias a tu perseverancia, empujando la piedra cada día, desarrollaste una gran fortaleza física y tus enemigos no han podido contra ti. Ahora eres fuerte espiritual y físicamente. Has vencido al demonio y a tus enemigos de la tierra. ¿Crees que fracasaste?. Cierto, no has movido la roca, pero tu misión era solo ser obediente y empujar para que yo cumpla en ti mis designios. Lo has conseguido. Ahora, querido hijo, Yo moveré la roca".
Querido hermano: La palabra de Dios encierra un misterio que sobrepasa nuestra razón. Dios nos pide confianza y perseverancia.

Dios te ha enseñado su camino. ¡OBEDECELE Y PERSEVERA!
Cuando todo parezca ir mal... ¡OBEDECELE Y PERSEVERA!
Cuando parece que no tiene sentido... ¡OBEDECELE Y PERSEVERA!
Cuando estés agotado por el trabajo... ¡OBEDECELE Y PERSEVERA!
Cuando la gente simplemente no comprende tu fidelidad a Dios... ¡OBEDECELE Y PERSEVERA!

EL ELEFANTE

Cuando yo era chico me encantaba ir al circo, especialmente para ver al elefante. Durante la función, la enorme bestia hacia despliegue de peso, tamaño y fuerza descomunal ... pero después de su actuación y hasta un rato antes de volver al escenario, el elefante quedaba sujeto solamente por una cadena que aprisionaba una de sus patas a una pequeña estaca clavada en el suelo. Sin embargo, la estaca era minúscula, me parecía insuficiente para atar un elefante. Aquel animal capaz de arrancar un árbol de cuajo con su propia fuerza, podría, con facilidad, arrancar la estaca y huir.

El misterio: ¿Que lo mantiene entonces?, ¿Por que no huye? Pregunte a muchas personas y me daban razones insuficientes. Uno me dijo que el elefante no escapaba porque estaba amaestrado. Entonces la pregunta obvia:-Si esta amaestrado, ¿por que lo atan a la estaca? No recuerdo haber recibido ninguna respuesta coherente. Con el tiempo aquella incógnita se quedó guardada en los recesos de mi memoria sin darle mas atención.

Un día encontré la explicación: "El elefante del circo no escapa porque ha estado atado a una estaca parecida desde que era muy pequeño". Cerré los ojos y me imaginé al pequeño recién nacido sujeto a la estaca. Estoy seguro de que en aquel momento el elefantito empujó, tiró y sudó tratando de soltarse. Y a pesar de todo su esfuerzo no pudo. La estaca era ciertamente muy fuerte para el. Al día siguiente volvió a probar, y también al otro y al que seguía... Hasta que un día, un terrible día para su historia, el animal acepto su impotencia y se resignó a su destino. Este elefante enorme y poderoso no escapa porque cree que NO PUEDE. El tiene registrada en su memoria el recuerdo de su impotencia, de aquella impotencia y jamás se ha vuelto a cuestionar seriamente ese registro. Jamás ... Jamás ... intentó poner a prueba su fuerza contra la estaca otra vez.

... Cada uno de nosotros somos un poco como ese elefante: vamos por el mundo atados a estacas que nos restan libertad. Vivimos creyendo que un montón de cosas "no podemos" simplemente porque alguna vez probamos y no pudimos. Grabamos en nuestro recuerdo: No puedo ... No puedo y nunca podré. Crecimos portando ese mensaje que nos impusimos a nosotros mismos y nunca mas lo volvimos a intentar. La única manera de saber, es intentar de nuevo poniendo en el intento TODO TU CORAZON.

San Pablo enseña: "Todo lo puedo enCristo que me fortalece" Filipenses 4,13

En Cristo tenemos la capacidad para actuar plenamente según el amor con los dones que El nos ha dado. Cristo nos libera del pecado que es la "estaca" que nos amarra a una existencia sin sentido.

Hay, sin embargo, quienes creen que el cristianismo es como la estaca del elefante, que nos prohíbe tomar libertades. ¿Que nos prohíbe el Cristianismo? Lo que es pecado, es decir lo que es indigno del ser humano porque es contrario al amor. El pecado y no el cristianismo es la estaca del hombre.

«Si vosotros permanecieris en mi Palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.» Juan 8,31-32

HOY.. NO QUIERO OFENDER CON MIS LABIOS

“Porque todos ofendemos muchas veces: Si alguno no ofende en palabra, éste es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo”. Santiago 3:2
.Cuantas veces me he llevado las manos a la cabeza y he querido desaparecer porque he dicho lo que no debía decir o donde no debía decirlo.
.Cuantas veces no he querido volver a ver a esa persona por la vergüenza que he sentido de haber fallado con mi boca. Con dolor he comprendido que realmente la parte más difícil de mi cuerpo es la lengua. Por eso, Hoy, no quiero ofender con mis labios.
.Se que todos ofendemos en algún momento…..pero hoy puedo pedir a Dios que me ayude a no caer otra vez en esa tentación, de no saber controlar mi lengua.
.La Biblia es clara cuando dice que nosotros ponemos freno en la boca de los caballos para que nos obedezcan, y dirigimos así todo su cuerpo….Aún las naves; aunque son tan grandes, y llevadas por impetuosos vientos, son gobernadas con un muy pequeño timón por donde el que las gobierna quiere y así también la lengua aunque es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas.
.La Biblia dice que ese pequeño fuego puede encender un grande bosque. Se me olvida con frecuencia que guardada en mi boca hay una pequeña llama que puede incendiar toda una casa hasta volverla cenizas o puede prender una estufa para alimentar al hambriento.
.Yo se que el problema no está en la lengua….sino lo que hay detrás de la lengua, por eso..hoy….decido en este devocional poner en las manos de Dios no solo mi lengua, sino lo que hay detrás de ella..lo que hay en mi corazón.
.Si es verdad que puedo incendiar un gran bosque..también podrá encender un calentador para dar abrigo al que muere por el frío penetrante de la oscura noche mundanal. Es una decisión que tomo hoy. No quiero ofender con mis labios, sino que quiero alentar al desprotegido y alimentar al desnutrido emocional.
.Señor. Gracias por este día que me regalas y esta oportunidad de vivir para ti. Hoy, no quiero hablar por hablar….Ni quiero usar mis labios para ofender o herir a alguien.
.Conoces Señor, las veces que he llorado delante de ti por mis desvíos verbales y mis tropiezos vocales. Me quieres dar tu gracia para que así pueda transmitir gracia y amor.
.Hoy, hay muchos heridos en las casas y las calles porque alguien no cuido sus labios…Pero hoy, te digo Señor…Pon guarda a mis labios para no herir y en lugar de eso alimentar y fortalecer,. animar y guiar al que desorientado se encuentro conmigo, En tu nombre Señor lo pido. Amen.
.

AYUDA PARA EL DESVALIDO

Lectura: Hebreos 4:14-16
. . . acerquémonos con confianza al trono de la gracia para que recibamos misericordia, y hallemos gracia para la ayuda oportuna. --Hebreos 4:16.
A veces pregunto a la gente: ¿Dónde se encuentra en la Biblia que Dios dice «ayúdate, que yo te ayudaré»? La mayoría contesta que no están seguros, pero el concepto es tan conocido, que creen que debe estar en alguna parte de la Palabra de Dios.
En realidad, la Biblia no dice eso en absoluto. Nos dice justo lo contrario: Dios ayuda al desvalido.
Cuando lees los Evangelios descubres que Jesús no rehusó ayudar a los que no tenían ayuda. No retuvo el perdón ni la compasión de aquellos que admitían su pecado. No se alejó de los que no tenían el poder para cambiar. De hecho, la gente que más lo perturbaba era la que creía que no necesitaba ayuda alguna.
Los pensamientos de Dios son más altos que los nuestros (Isaías 55:9), y Él ve las cosas de manera distinta a como las vemos nosotros. Nosotros vemos nuestra propia capacidad de lidiar con los problemas; Él nos muestra nuestra debilidad para enseñarnos a confiar en su fortaleza. Nosotros nos enorgullecemos de nuestros éxitos y empezamos a pensar que no necesitamos la ayuda de Dios; Él nos permite fracasar para enseñarnos que el verdadero éxito viene por medio de su gracia.
¿Te sientes desvalido hoy? La gracia de Dios está disponible para aquellos que reconocen que no pueden ayudarse a sí mismos. «Acércate con confianza al trono de la gracia» para que encuentres ayuda en tu tiempo de necesidad (Hebreos 4:16).
DIOS AYUDA A LOS QUE SABEN QUE SON DESVALIDOS.