miércoles, 3 de junio de 2009

HOY..PODRE QUEDAR ATÓNITO

“Mas Pedro persistía en llamar; y cuando abrieron y le vieron, se quedaron atónitos” Hechos 12:16.
Hay cosas en la vida que nos dejan sorprendidos. Noticias que no esperábamos, reacciones incontrolables que nos desajustan, regalos que nos dejan con la boca abierta, amigos que hacía años no veíamos, libros que creíamos perdidos. La vida está llena de sorpresas. Con Dios siempre existe la posibilidad de ser sorprendidos. Dios es Dios de grandes sorpresas. Siempre he dicho que caminar con Dios es una aventura y un misterio. Una aventura porque el me llevará por caminos que nunca he imaginado transitar y un misterio porque él no me revela el resto del camino sino que me lo va desplegando paso a paso y ese es el camino de fe.En el Capítulo 12 de Hechos narra que Pedro estaba preso y la Iglesia oraba por él. Pedían sin duda la liberación de Pedro. Dios les sorprende tanto a Pedro como a la Iglesia con una liberación inesperada y milagrosa. Pedro llega a la casa donde los hermanos oraban.No podían creer que era Pedro. Curiosamente encontramos que ellos oraban por Pedro y ahora que el Señor lo libera no lo pueden creer. Llamaron hasta loca a Rode la joven que llevó la noticia que Pedro estaba a la puerta. Quedaron atónitos, es igual que quedarse de una sola pieza, sin moverse. Oh, amados l, muchos quedáramos atónitos cuando a raíz de tu vida devocional, vean lo que Dios hará contigo, en ti y a través de ti. Dios aún sorprenderá a muchos.Necesitamos creer en Dios y esperar grande cosas. A veces nuestra mente es pequeña y aunque oramos una pequeña sombra de duda parece esconderse sigilosamente para saltar con incredulidad en el momento en que Dios decide sorprendernos.La más grande sorpresa de la vida estará delante de nosotros. Hoy, decido estar listo para quedar atónito ante la manifestación poderosa y gloriosa de el único Dios viviente.
Señor, Confieso en este día a que veces mi incredulidad es muy grande que no me deja ver tu majestuosidad. Sin embargo, a pesar de mi duda tu gracia y misericordia son mayores para sorprenderme. Hoy, decido ante ti ser sorprendido y dispuesto a quedar atónito ante tu amor. En el Nombre de Jesús. Amén.

SIEMPRE INSISTE

Un estudio conducido por la National Retail Dry Goods Association señala que los primeros intentos sin éxito llevan a casi la mitad de los vendedores a cierto fracaso. Ponga atención:
48 por ciento de los vendedores hacen una llamada y desisten.
25 por ciento de los vendedores hacen dos llamadas y desisten.
15 por ciento de todos los vendedores hacen tres llamadas y desisten.
12 por ciento de todos los vendedores insisten e insisten e insisten e insisten.
Ellos hacen el 80 por ciento de todas las ventas.
Insistencia es un resorte que nos impulsa al gran salto de las nuevas oportunidades. Son muchos los que se han quedado frustrados en el camino, cuando en realidad había delante de ellos la oportunidad más grande de su vida. Insista, insista e insista porque muy pronto la puerta se te abrirá.
Perverancia es una semilla que cuando germina produce uno de los árboles más frondosos de la vida.

Mas la que cayó en buena tierra, éstos son los que con corazón bueno y recto retienen la palabra oída, y dan fruto con perseverancia. Lucas 8:15
Orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos. Efesios 6:18

NEGOCIO ARRIESGADO

Lectura: Mateo 8:23-27.
"Él les dijo: ¿Por qué teméis, hombres de poca fe? Entonces, levantándose, reprendió a los vientos y al mar; y se hizo grande bonanza" Mateo 8:26.
Denis Boyles sabía que sería un desafío entrevistar a un hombre en una montaña rusa -especialmente si la entrevista tenía lugar durante un intento por establecer un récord mundial de vueltas continuas. Después de haber completado el trayecto varias veces, el temor se había apoderado de Denis de tal modo que apenas si podía hablar.Luego el entrevistado le mostró cómo usar su cuerpo y sus pies para apoyarse en los lazos, giros y curvas. En su artículo en una conocida revista, Boyles explicó como eso fue lo que le quitó el terror. También le enseño una lección acerca del riesgo y el temor. La montaña rusa parecía arriesgada aunque era bastante segura; pero conducir su automóvil al parque de diversiones representaba un riesgo de daño mucho mayor. El riesgo y el temor se confunden fácilmente.Cuando Jesús y Sus discípulos cruzaban el Mar de Galilea, surgió una tormenta y las olas barrían su barca. Increíblemente, Jesús estaba dormido. Los discípulos le despertaron y dijeron: "¡Señor, sálvanos, que pereceremos!" (Mateo 8:25). Con una amable reprimenda, Jesús preguntó: "¿Por qué teméis, hombres de poca fe? Entonces, levantándose, reprendió a los vientos y al mar; y se hizo grande bonanza" (v. 26).Al igual que los discípulos, cuanto más aprendemos de Jesús, tanto más confiamos en Él. Nuestro mayor riesgo es no depender de Él cuando la vida parece fuera de control.
Mantén tus ojos en Jesús y pronto perderás de vista tus temores.

martes, 2 de junio de 2009

SEPARACIÓES NECESARIAS

Desde antes que nacieran, ya eran la alegría de la familia. Hasta los cinco hijos en el hogar esperaban el arribo con entusiasmo. Pero cuando Clara y Altagracia nacieron, allí comenzó la gran preocupación. Eran dos preciosas y saludables niñas que venían a engrosar la familia Rodríguez, pero eran siamesas. Sus cuerpecitos estaban unidos por el abdomen y la cintura.

Cuando las niñas cumplieron trece meses de edad, las llevaron a la ciudad de Filadelfia, Pennsylvania, en los Estado Unidos. Allí un equipo de veintitrés cirujanos, dirigidos por el Dr. Everett Koop, trabajaron para separarlas.

Cada una de ellas tenía sus propios órganos internos, aunque estaban entrelazados. Separarlos fue toda una hazaña de la cirugía. Al terminar la operación, el Dr. Koop anunció: «Las niñas crecerán sanas y normales. Hasta podrán tener hijos normales cuando sean grandes y se casen.»

¡Qué estupendas son las proezas de la medicina! El hábil bisturí sabe penetrar hasta lo más profundo de la carne humana, y dividir tejidos, vasos, órganos y nervios. Y después de hacer esas operaciones formidables en que se extirpan tumores, se cosen arterias, se injertan retinas y se trasplantan órganos, la persona operada queda sana y normal, viviendo y trabajando como si nada. Así fue el caso de las mellizas Rodríguez.

Si pudiéramos contemplar nuestro fuero interno con un aparato especial, capaz de penetrar alma y espíritu, veríamos que cada uno de nosotros lleva pegado, también, un hermano siamés. Me refiero a ese «otro yo», esa segunda naturaleza que cada uno lleva y que se comporta muy diferente de la otra. Tal parece que somos dos personas juntas, pero no al modo de las lindas criaturas Clara y Altagracia.

En nuestro caso, una es buena y otra mala. Una tiene elevados sentimientos morales, y la otra, instintos de bestia. Una es capaz de grandes virtudes; la otra vive ligada a vicios y pasiones. Una eleva; la otra destruye. Es probable que alguno de nosotros se haya preguntado: «¿Por qué soy yo así?»

¿Habrá quien pueda separar esos hermanos siameses que somos nosotros mismos? Sí, es Jesucristo, el gran Médico divino. Al aplicar su bendita gracia, Él puede quitar de nosotros la parte mala y dejar sólo la buena. Tenemos que desearlo y pedirlo, pero Él puede realizar esa operación espiritual. Jesucristo la llama «el nuevo nacimiento». Démosle la oportunidad. Él quiere ser nuestro Médico divino.

Hermano Pablo

HOY..CONTEMPLARE PUERTAS ABERTAS

“Habiendo pasado la primera y la segunda guardia, llegaron a la puerta de hierro que daba a la ciudad, la cual se les abrió por sí misma; y salidos, pasaron una calle, y luego el ángel se apartó de él”. Hechos 12:10.
Yo quería entrar por esa puerta, mis manos pequeñas de niño me decían que era casi imposible. Mis fuerzas eran limitadas, pero mis ganas eran superiores. Por más que quería no podía. De pronto fui sorprendido, unas manos fuertes, grandes de adulto tomaron la puerta y ella cedió fácilmente. Mi hermano mayor , viendo mi deseo y mi imposibilidad en una franca lucha, vino en mi defensa.Este incidente me hace recordar que hay momentos en la vida cuando entró en conflicto entre lo que anhelo y lo que puedo. Se que Dios está a mi lado para ayudarme a abrir las puertas que se cierran.El Apóstol Pedro estaba en la Cárcel y además de un ángel, una luz y las cadenas cayéndose, Pedro sorprendido comenzó a seguir al ángel.Las puertas se abrieron milagrosamente. Pedro no sabía cómo. Pero se abrieron. Amados, muchas veces en la vida vemos solo puertas cerradas. Hay un fuerte anhelo por ver esas puertas abriéndose pero parece pegadas por el herrumbre y pocas esperanzas tenemos de que se abran. Una vida devocional consistente y profunda nos lleva a ver como Dios como el que abre y ninguna cierra y el que cierra y ninguno abre, comienza a abrir aquellas puertas para que ministremos a la ciudad en nuevas esferas. He aquí vienen días en tu ministerio, si mantienes una vida devocional renovada, en que se abrirán nuevas puertas de ministerio. Harás lo que nunca has hecho e irás donde nunca has ido. Hablarás lo que nunca has hablado y verás lo que nunca has visto.
Señor, tú sabes como he sentido muchas veces frente a las puertas cerradas. Puerta de oportunidades, puertas de nuevos empleos, puerta de matrimonio, puertas de finanzas, pero en este día ayúdame a creer que tú quieres y puedes abrir esas puertas en tu tiempo y a tu manera. Amén.

MI INSPIRACION

El escultor alemán, Dannaker, trabajó por dos años en una estatua de Cristo hasta que le pareció que estaba perfecta. Llamó a una pequeña niña a su estudio, señaló a la estatua y le preguntó:
-¿Quién es ese?
Ella lo miró por un momento, y luego sus ojos se le llenaron de lágrimas mientras cruzaba sus brazos en su pecho y decía:
-Deja a los niños venir a mí. (Marcos 10:14)
En esta ocasión Dannaker supo que había tenido éxito.
Luego, el escultor confesó que durante esos seis años, Cristo se le había revelado en una visión, y su parte fue transferir al mármol lo que él había visto con sus ojos internos.
Más tarde, cuando Napoleón Bonaparte le pidió que hiciera una estatua de Venus para el Louvre, Dannaker rehusó.
-Un hombre –dijo él- que ha visto a Cristo nunca puede emplear sus dones en esculpir una diosa pagana. Mi arte es, por tanto, algo consagrado.
El verdadero valor de un trabajo no viene de un esfuerzo, ni por su acabado, sino de Cristo que lo inspira.
Tomado de El libro devocionario de Dios para jóvenes.
Romanos 12:11Fervientes en espíritu, sirviendo al Señor.

CONPINCHES

Lectura: Colosenses 1:3-8.
"Siempre orando por vosotros, damos gracias a Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo" Colosenses 1:3
En la Inglaterra del siglo XIX, la cárcel de los deudores albergaba a aquellas desafortunadas almas que no podían pagar sus cuentas. A los nuevos prisioneros se les escoltaba hacia la "compinchería", el dormitorio de la cárcel. Como las personas no estaban allí por crímenes violentos, pronto se desarrollaba un espíritu de confianza y camaradería. Jugaban juntos y tenían mucha comida. A algunos incluso se les permitía tener habitaciones privadas.Con el tiempo, los prisioneros comenzaban a referirse unos a otros como "compinches". Posteriormente, la palabra se puso de moda fuera de las paredes de la cárcel y adquirió el significado de "un amigo cordial".También en el ministerio cristiano se dan profundos lazos de amistad. Aquellos que trabajaban juntos con Pablo tampoco eran ajenos a la persecución y el encarcelamiento; pero una misión en común creó un profundo sentido de conexión. (Colosenses 1:7). El término puede parafrasearse como "co-esclavo" o "alguien que sirve al mismo amo junto con otro".Cuando los creyentes viven bajo el señorío de Cristo, pueden ver sus vidas entrelazadas en el servicio. Sirviendo como esclavos de Cristo, se crea una camaradería espiritual que transciende al hecho de ser "compinches". ¡Y esa relación especial continuará en la eternidad!.
Los cristianos se mantienen fuertes cuando se mantienen juntos.