viernes, 28 de noviembre de 2008

HOY..QUIERO SER UN CRISTIANO DE CREVILDAD

“Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible, tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor y reverencia” Heb 12:28.
Hoy, como Hijo y siervo de Dios no solo debo ser un discípulo que cree, pero un discípulo con credibilidad.
No es muy útil que yo pueda puntualizar la gracia de Dios a menos que esa gracia esté operando en mí.
En una ocasión un hombre de empresas dijo a sus empleados. Mi reputación está en sus manos. Acaso no podría el Señor decirnos lo mismo a nosotros, si decimos que somos sus discípulos?. En un sentido podemos decir que el destino de otros descansa sobre los que nos llamamos, “seguidores de Jesús”. No en un sentido absoluto, pero si en un sentido funcional.
Creo que en ese sentido, Pablo pudo decir: “Sed imitadores de mi, así como yo los soy de Cristo.
Hoy, mi influencia sobre otros par seguir a Jesús debe comenzar con mi credibilidad. Que ellos puedan creer lo que yo creo, no porque los convenzo con palabras sino con mi vida.. Sí, que este día al depender del Señor en todas las situaciones pueda trasmitir a otros esa credibilidad y ellos puedan terminar convencidos de que son el objeto del amor de Dios y del sacrificio redentor de Cristo.
Que ellos son de infinito valor para Dios. Yo no puedo persuadir a los demás del amor de Dios a menos que ellos vean hoy en mí el amor inocente que es la característica de un discípulo lleno del Espíritu Santo .
La gente que me rodea hoy, quieren creer..pero no creer en filosofías huecas y vanas sutilezas, sino creer en el Señor, sin embargo buscan hechos que les conmuevan. Mi vida necesita hoy ser un hecho que convenza a otros que el cristianismo realmente funciona.
Señor, Hoy quiero reconocer que he recibido en mi vida y he sido recibido en un reino inconmovible.
El Reino de los cielos, el cual opera hoy en medio de mi realidad. Por lo tanto quiero tener gratitud en mi corazón por ese hecho y mediante esa gratitud quiero servirte con temor y reverencia, consciente de que otros miraran y entenderán la realidad de tu reino en la manera como ellos puedan hoy ver en mi conducta que tu reino me ha afectado profundamente.
Hoy no quiero ser solo un discípulo que cree, sino un discípulo creíble..Uno que trasmita credibilidad en lo que digo tener en ti y por ti. En el Nombre de Jesús. Amen.

CUESTION DE PERSPECTIVAS

Mirta y Juana, que eran dos viejas amigas, fueron a almorzar a su restaurante favorito. Mirta felicitó a Juana por los recientes matrimonios de su hijo e hija.
-¿Cómo te las arreglaste con todo? -le preguntó Mirta-. Tener dos bodas en el mismo mes debe haber sido muy difícil.
-No lo creas -contestó Juana-. Fe mucha la alegría y el honor de ayudar a mis hijos en sus bodas. Estaba feliz por hacerlo.
-Bueno, dime -quiso saber Mirta-, ¿cómo es tu yerno?
-¡Ah! -suspiró Juana-, es un hombre maravilloso. Permite que mi hija duerma hasta tarde. A veces se levanta a las diez o las once de la mañana. Le dice que vaya al salón de belleza para arreglarse el cabello y las uñas todas las veces que quiera. Incluso insiste en llevarla a cenar fuera todas las noches.
-¡Increíble! -exclamó Mirta-. Es en verdad bendecida. Cuéntame de tu nueva nuera.
-Bueno -resopló Juana-, esa es una historia totalmente diferente. Duerme hasta las diez o las once de la mañana. Gasta todo el dinero de mi hijo en el salón de belleza con el cabello y las uñas. ¿Y puedes creer que insiste en comer fuera todos los días?
La vida es cuestión de perspectivas. La manera en que uno ve las cosas influirá en nuestra vida y también en la de quienes nos rodean. Vamos a comprometernos a ver las cosas desde la perspectiva de Dios. Su punto de vista siempre es claro como el agua.
Santiago 1:4Mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna.

UN PAJARO CANTOR EN LA OSCURIDAD

Lectura: Lucas1:67-80
Nos visitó desde lo alto la aurora. -Lucas 1:78
Justo antes de la salida del sol a menudo escuchamos a pájaros cantores dándole la bienvenida al amanecer. A pesar de la oscuridad, sabemos que la radiante luz del sol pronto aparecerá.
A Fanny Crosby se la ha llamado «El pájaro cantor en la oscuridad». Aunque quedó ciega en la infancia, escribió himnos que previeron de manera inspiradora nuestra reunión futura con Cristo. Muy temprano en su vida, Fanny tuvo un sueño en el que observó la visión de un cielo glorioso, y muchas de sus canciones reflejan ese tema. Cuando murió, había escrito al menos ocho mil himnos. Canciones tales como «Tell Me the Story of Jesus» («Cuéntame la historia de Jesús»), y «To God Be the Glory» («A Dios sea la gloria») siguen siendo populares hoy.
Cuando Zacarías alabó a Dios previendo al Mesías, también esperaba un amanecer espiritual. Citando a Malaquías 4:2, proclamó: «Nos visitó desde lo alto la aurora [amanecer], para dar luz a los que habitan en tinieblas» (Lc. 1:78-79). Ese Mesías vino a la tierra, murió por nuestros pecados, resucitó, ascendió y prometió regresar a buscarnos.
¿Te sientes rodeado por circunstancias oscuras y confusas? Todavía puedes elevar tu alabanza a Dios por el brillante futuro que compartirás con Su Hijo. Las palabras del amado himno de Fanny Crosby «Blessed Assurance» («Grata Certeza») nos animan al hacernos prever esta gloriosa reunión con Cristo.
Para el cristiano, los oscuros pesares de la tierra un día serán cambiados por los brillantes cantos del cielo.

jueves, 27 de noviembre de 2008

NIEVE, VIENTO Y SOL

Un blanco manto se extendía por todos lados. Era la primera nevada otoñal en Noruega, y la nación entera estaba cubierta del blanco armiño.

Tres niños jugaban en la nieve: la pequeña Silje Redegaard, de cinco años de edad, y dos amiguitos de ella, uno de cinco años y otro de seis.

De pronto, en un sorpresivo estallido de violencia, los dos niños comenzaron a pegarle con palos a Silje Redegaard, hasta que quedó inconsciente. Poco tiempo después murió, congelada. Los dos homicidas pudieron explicar lo que pasó. Lo maravilloso, lo increíble, lo inesperado fue la reacción de la madre de Silje, Beathe Redegaard, pues dijo: «Yo perdono a estos niños. Ellos no sabían lo que hacían.»

Aquel trágico suceso sacudió a toda Noruega, un país excepcionalmente culto, pacífico y ordenado. Nadie hubiera esperado que dos niños tan pequeños tuvieran tal ataque de furia. En la blanca nieve del otoño, sopló, de golpe, el viento de la violencia. Pero luego hubo, también, un rayo de sol: el perdón de la madre de la niña muerta.

La nieve, el viento y el sol pueden emplearse como símbolos del drama universal humano. La nieve es fría, inmóvil, silenciosa. Representa, en toda su indiferencia y frialdad, la muerte. El viento, que a veces se vuelve torbellino al soplar con furia descontrolada, representa la violencia. Y el sol, cálido y bueno, representa la acción perdonadora y salvadora de Dios. Por eso a Cristo se le llama en la Biblia «el sol de justicia» (Malaquías 4:2).

Toda acción ofensiva de los hombres —toda injusticia, todo despotismo, todo pecado— trae aparejada la muerte. «La paga del pecado es muerte» (Romanos 6:23a) es la sentencia inapelable de Dios. Y hay que reconocer que vientos de violencia soplan furiosos por todas la comarcas del mundo.

Sin embargo, hay un Sol de justicia que nos ofrece perdón, tal como se lo ofreció Beathe Redegaard a los dos niños asesinos de su hijita. Puede haber en la humanidad mucha violencia, mucha maldad y mucho pecado, pero por encima de todo hay un inmenso manto de perdón.

Fue San Pablo quien dijo que «la paga del pecado es muerte». Pero añadió que «la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, nuestro Señor» (Romanos 6:23b). El sacrificio de Cristo al morir en la cruz basta para limpiar todos nuestros pecados.

Si le pedimos perdón a Dios, no importa cuáles ni cuántos han sido nuestros pecados, con tal que nos arrepintamos sincera y profundamente. Cristo desea ser nuestro Salvador.

Hermano Pablo

VISION 2O/20

Los biólogos marinos, en estos días están adquiriendo abundantes conocimientos sobre los suelos del océano y todo esto, gracias al submarino que ha sido diseñado en especial, para transportar una sola persona. Con la habilidad de permanecer sumergidos hasta un máximo de ocho horas continuas y capaz de bajar casi un kilómetro de profundidad, estos submarinos le dan un nuevo significado al término, Panorama oceánico, gracias a una caja de un pasajero transparente hecha de acrílico. Los submarinos están equipados con luces, impulsores eléctricos, brazos hidráulicos, así como instrumentos científicos de navegación y equipo de supervivencia.
Sin embargo, pese a todos los aparatos de alta tecnología, el siguiente hecho no cambia: ¡Es bastante oscuro allá abajo!
La luz del sol, tan solo penetra hasta un límite. Después de cierto punto en el descenso, es necesario utilizar otra fuente de luz, si deseas observar las maravillas de las profundidades.
Lo mismo es aplicable a las criaturas de las profundidades del mar, muchas de las cuales emiten cierta forma de iluminación natural conocida como bioluminiscencia. Para algunos, la luz inherente a ellos, es usada como un mecanismo de defensa. Los enemigos son rociados con un tejido luminoso que convierte al cazador en presa.
Para otros, la luz provee camuflaje. La poca luz del sol que desde arriba logre penetrar la oscuridad, obra en combinación con la procedente de la parte inferior de las criaturas y borra cualquier sombra que pueda delatar su posición.
Pocos de nosotros, descenderíamos al nivel de estas criaturas, pero sí, entendemos, cómo han de sentirse en cuanto a la luz. Cuando manejamos tarde en la noche, por una carretera poco iluminada, dependemos de las luces delanteras del auto para evitar salirnos del pavimento. Protegemos nuestras casas de intrusos, al iluminar el patio con focos.
Para vivir en este mundo oscuro y confuso, el Señor ha colocado en nosotros Su propia luz, el Espíritu Santo. Él nos revela lo que es verdadero y bueno, así como dónde ir y qué sitios evitar. Él es nuestra conciencia y guía.
Al hacer una evaluación del día vivido. ¿Puedes señalar las veces que el Espíritu Santo te dirigía o indicaba lo que estaba bien o lo incorrecto?
Mateo 5:16Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.

LA AMABIDAD DE LOS EXTRAÑOS

Lectura: Filipenses 2:1-8
No os olvidéis de la hospitalidad, porque por ella algunos, sin saberlo, hospedaron ángeles. —Hebreos 13:2
Durante un vuelo a Surabaya, Indonesia, para una conferencia bíblica, las azafatas trajeron el servicio de comidas. Acababa de comer en el aeropuerto de Singapur, así que decliné, y pedí tan sólo un refresco. El hombre indonesio que estaba a mi lado, un extraño, estaba visiblemente preocupado.
Me preguntó si me sentía bien, y le aseguré que lo estaba. Luego me preguntó si tal vez la comida no me parecía apetecible. Le respondí que simplemente no tenía hambre. Luego me sorprendió ofreciéndome su propia comida, pensando que si la probaba tal vez de hecho me gustaría. Lo hizo de una manera tan amable y auténtica que obviamente fue una expresión de su preocupación por mi bienestar.
En un mundo egocéntrico donde estamos acondicionados a buscar nuestros propios intereses por encima y más allá de todo y todos los demás, tal amabilidad fue algo inesperado. El sencillo gesto del hombre mostró un tipo de corazón y de conjunto de valores diferentes. Como seguidores de Cristo, estamos llamados a servir como modelos de una actitud contra-cultural similar hacia la vida (Fil. 2:1-8).
En Hebreos 13:2 leemos: «No os olvidéis de la hospitalidad, porque por ella algunos, sin saberlo, hospedaron ángeles». Qué mejor manera de representar a Cristo que con amabilidad —incluso a los extraños.
La amabilidad es un regalo que cualquiera puede dar.

miércoles, 26 de noviembre de 2008

¡ NO ME ACUERDO !

Una vez un ministro muy querido llevó un secreto, enterrado por mucho tiempo en lo profundo de su corazón, el peso de un pecado.
Él había cometido es pecado hacía muchos años durante su entrenamiento en el Seminario. Nadie sabía lo que había hecho, pero él sabía que estaba arrepentido. Aun así, había sufrido remordimientos por años, sin idea del perdón de Dios.
Una mujer en su iglesia amaba al Señor profundamente y afirmaba que tenía visiones en las que Jesús le hablaba. El ministro, escéptico de sus afirmaciones, le pidió: “La próxima vez que hable con el Señor, podría preguntarle cuál fue el pecado que su ministró cometió mientras estaba en el Seminario”. La mujer asintió.
Cuándo volvió a la iglesia unos días después el ministro le preguntó: “¿Le visitó?” Ella contestó: “Sí”.
- “¿Y le preguntó qué pecado cometí en el Seminario?”
- “Sí”, respondió.
- “Bien, ¿qué le dijo?”
- Dijo, “no me acuerdo”.
Toda persona debe tener un lote especial en el cementerio donde enterrar las faltas de los amigos y familiares.
Efesios 4:32Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándonos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.