domingo, 26 de octubre de 2008

HOY.. REFLEJARE SU IMAJEN

“Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen; como por el Espíritu del Señor.” II Cor 3:18
Cada día al levantarme miro mi rostro en el espejo para prepararme físicamente antes de enfrentar las exigencias diarias de mi trabajo. Allí, frente al espejo corrijo lo que es necesario y me veo tal cual soy.
Hoy, cuando nuevamente lo hice recordé este pasaje de Pablo. Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos trasformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor.
Si, esta mañana me mire al espejo para transformarme de una cara soñolienta a una despierta y activa, de un cabello despeinado a uno preparado para una buena imagen. Pero, hoy entendí que cada día necesito mirarme también en el espejo de la palabra de Dios para ser transformado ya no físicamente, sino espiritualmente y seré trasformado a la misma imagen de él.
Ser transformado de gloria en gloria. Gloria significa . Calidad, peso, valor. La calidad y el peso y el valor del Señor quiere ser traspasado a mi en mi manera de vivir.
El mundo me ha querido quitar la calidad y peso así como valor que Dios quiere que tenga. Pero la presencia de Dios y la orientación de su palabra me devuelven lo que el mundo me quito….me devuelve el peso, la calidad y el valor y por ello soy transformado de gloria en gloriado de peso en peso…de Calidad en calidad, de valor en valor.
Cuál es le mecanismo ideado por Dios?. Por el Espíritu de Dios. Hoy, entiendo que el trabajo del Espíritu Santo hoy es muy importante y no debo ignorarlo. El Espíritu Santo unido a la palabra de Dios se encargaran de trasformar mi imagen, distorsionada y agotada a la imagen hermosa, perfecta y sublime del hijo de Dios.
Cuando me niego a obedecer la orientación de tu palabra, Me niego a perdonar, amar y obedecer, la imagen que miró en el espejo no es la imagen de Jesús. Es mi propia imagen. Cuando obedezco, busco el rostro de él y practico la palabra entonces los rasgos del Salvador comienza a verse. Hoy, quiero reflejar su imagen.
“Señor: Para que vivir hoy enseñando mi imagen distorsionada. Aunque quiera prepararla y arreglarla lo que se ve no es lo de afuera, sino lo que llevo por dentro. Yo quiero hoy, acercarme a ti para decirte, como por un espejo, de cara a ti, quiero ser transformado de gloria en gloria a la misma imagen de Jesús, por su tu Santo Espíritu.
No quiero dar pasos de desobediencia, ni de vanagloria, ni de resentimiento. Quiero vivir en plenitud de vida por la obediencia a tu palabra. Amen.

LA ZORRA CON EL RABO CORTADO

Una zorra a la cual un cepo le había cortado la cola, estaba tan avergonzada, que consideraba su vida horrorosa y humillante, por lo cual decidió que la solución sería aconsejar a las demás hermanas cortarse también la cola, para así disimular con la igualdad general, su defecto personal.
Reunió entonces a todas sus compañeras, diciéndoles que la cola no sólo era un feo agregado, sino además una carga sin razón.
Pero una de ellas tomó la palabra y dijo: “Oye hermana, si no fuera por tu conveniencia de ahora, ¿nos darías en realidad este consejo?”
Cuídate de los que dan consejo en busca de su propio beneficio, y no por hacer realmente un bien.
Fábula ESOPO
Cuánta falta hacen personas que se interesen realmente en los demás por el solo hecho de querer verlas prosperar y vivir a plenitud la vida que Dios tiene para ellas! Tristemente, tal y como lo ilustra la fábula de hoy, muchos de los consejos que hoy recibimos necesitamos filtrarlos a la luz de posibles intereses ocultos de quienes los brindan. Eso no quiere decir que debemos desconfiar de todos, simplemente que necesitamos desarrollar nuestro discernimiento a la luz de una relación íntima con Dios. El Señor sabrá guiarnos y darnos la sabiduría que ha prometido a todos los que se la pidan… y abundantemente, para poder tomar buenas decisiones.

Proverbios1:7
El principio de la sabiduría es el temor de Jehová.

UNA PREGUNTA TAN ANTIGUA COMO EL TIEMPO

LEA: Job 2:1–10
¿Aceptaremos el bien de Dios y no aceptaremos el mal? —Job 2:10
Cuando Jeremy tenía 17 años, luchó con una pregunta con la que los teólogos han batallado por siglos. Para él, el problema no era teórico sino práctico. Estaba tratando de entender por qué a su madre la tenían que operar del cerebro. Preguntó: «¿Por qué sufren las personas que son buenas, mamá?»
Ella le dijo: «El sufrimiento es parte de vivir en un mundo que ha recibido la maldición del pecado, y las personas buenas sufren como todos los demás. Esa es la razón por la estoy feliz de que tengamos a Jesús. Si muero, iré a un mejor lugar, y anhelo el día cuando pueda volver a verte». Luego ella dijo que podía entender la frustración de Jeremy, pero le dijo que no le echara la culpa a Dios.
Si tú y yo estamos desconcertados por el sufrimiento de personas buenas, podemos plantearle la pregunta de lleno a Dios, argumentar con Él si debemos hacerlo, y luchar con nuestras dudas. Pero no Le echemos la culpa.
Dios no le explicó a Job lo que estaba haciendo, pero dijo que podíamos confiar en que lo que Él hacía es lo correcto (Job–42). Y Él nos ha asegurado en Su Palabra que Jesús sufrió a nuestro favor, resucitó de entre los muertos, y ahora está preparando un lugar libre de sufrimiento para nosotros.
Puede que estas no sean las respuestas que queremos, pero son las respuestas que necesitamos para ayudarnos a vivir con esa pregunta tan antigua como el tiempo y a menudo incontestable acerca del sufrimiento.

sábado, 25 de octubre de 2008

HACIA DONDE ESTOY YENDO

LEA: Gálatas 6:7-10
Todo lo que el hombre siembre, eso también segará. -Gálatas 6:7
Algunas personas envejecen con gracia, mientras que otras se hacen cascarrabias y de mal genio. Es importante saber hacia dónde estamos yendo porque todos estamos yendo hacia los años de ancianidad.
Las personas no se vuelven irritables ni adquieren mal genio sólo porque envejecen. La edad no tiene que hacernos súper criticones ni malhumorados o maniáticos. No, lo más probable es que finalmente hemos llegado a ser aquello hacia lo que habíamos estado yendo todo el tiempo.
Pablo escribió: «Porque el que siembra para su propia carne . . . segará corrupción, pero el que siembra para el Espíritu . . . segará vida eterna» (Gál. 6:8). Aquellos que se consienten en su interés personal y sólo piensan en ellos mismos están sembrando semillas que producirán una cosecha de sufrimiento para sí mismos y para los demás. Por otro lado, aquellos que aman a Dios y se preocupan por los demás están sembrando semillas que, con el tiempo, producirán una cosecha de gozo.
C. S. Lewis lo puso de este modo: «Cada vez que haces una elección estás convirtiendo la parte central de ti, la parte de ti que elige, en algo un poquito diferente a lo que era antes». Podemos elegir someter nuestras voluntades a Dios cada día, pidiéndole que nos dé fuerza para vivir para Él y para los demás. A medida que Él obra dentro de nosotros, creceremos en gracia y en amabilidad.
Así que la pregunta que nos debemos hacer es: ¿Hacia dónde estoy yendo?

PORQUE EL PECADO SE PUEDE ASOMAR

Proverbios 10: 19 “En las muchas palabras no falta pecado; Mas el que refrena sus labios es prudente”
En mas de alguna ocasión nos ha pasado, así que no puedes negar que en algún momento de tu vida has hablado de mas y el pecado se ha asomado.
Cuando alguien esta hablando en contra de nosotros o nos esta acusando de algo de lo cual a lo mejor no hemos tenido culpa, no podemos negar que no es difícil quedarnos cayados.

Para algunos más que para otros les es mucho más difícil el quedarse cayados. Yo padezco de este mal, a veces quisiera amarrarme la lengua para no responder a alguna acusación, pero la vieja naturaleza carnal, no me lo permite y en la mayoría de veces tengo que defenderme.

El problema no es tanto el defenderse, aunque bien debemos saber que nuestro Abogado es Dios y el nos defiende de mejor manera que nosotros mismos. Pero el verdadero problema radica en hablar mas de la cuenta, al exaltarte o cuando las palabras suben de tono. Es ahí en donde el pecado desea aparecer, cuando ya no tenemos el control de nosotros mismos, sino que dejados llevar por la emoción comenzamos a decir palabras que después de dichas nos arrepentimos.

Otro momento en donde el hablar de mas nos puede llevar al pecado, es cuando estamos hablando de otra persona a espaldas de ella, mas aun cuando se esta criticando.

Realmente es difícil sostenernos de hablar de mas muchas veces, pero parte de edificar un carácter de siervo en mi vida, es el hecho de cuidar lo que hablo. Sin lugar a dudas la Palabra de Dios dice que de la abundancia del corazón habla la boca, eso quiere decir que las palabras que de tu boca salgan, son las que están anidadas en tu corazón.

Lo mejor que podemos hacer para agradar a Dios es evaluar lo que estamos hablando, colarlo en la presencia de Dios y ponernos a pensar por un momento que si Jesús estuviera en medio de esa platica, ¿Hablaría de más? O ¿Hablaría de esa manera?, es ahí donde tenemos que tratar de que en cada platica que tengamos hacer de caso que Jesús esta en medio de esa platica y no hablar lo que no me gustaría que Jesús escuchara.

No hables de más, porque en las muchas palabras no falta el pecado y el pecado te lleva a la derrota espiritual, no demos a luz al pecado a través del hablar de más, cuando no hay la necesidad de hacerlo.

Autor: Enrique Monterroza

viernes, 24 de octubre de 2008

LA VIDA TE DA RECURSOS

Era una madre sabia y generosa. Un día, le dio a su hijo mil monedas de oro para que con ellas consiguiera lo que quería para su vida. Él las recibió con una emoción mezclada entre el entusiasmo y el miedo. Fue de compras, vio un automóvil muy grande y lento para su gusto y de una calidad técnica que dejaba mucho que desear; sin embargo lo compró.
Fue después a una joyería y encontró unos diamantes mal cortados y montados en anillos inapropiados y a pesar de esto, pagó una gran suma por ellos.. Organizó fiestas a las que invitó personas que conocía, pero que no disfrutaba de su compañía.
Con el pasar del tiempo, este hombre antes alegre y lleno de ilusiones, se fue convirtiendo en alguien amargado y quejumbroso. Años después se acercó de nuevo a su madre y le dijo:
- Madre, ¿qué habré hecho tan mal que vivo tan infeliz?
La madre le respondió:
- No es lo que has hecho hijo; es lo que sigues haciendo, aún en este preciso instante.
- ¿A qué te refieres?- preguntó el hijo.
Y afirmó la madre en un tono sereno y comprensivo:
- Tú usaste tus recursos y tu energía, para llenarte de lo que no querías, en vez de enfocarte en lo que querías. Ahora me preguntas: ¿qué he hecho mal? Podrías preguntar en cambio, ¿qué he hecho bien? o ¿cómo puedo mejorar lo que tengo?
- No te entiendo. dijo confuso el muchacho.
La madre respondió:
- Las monedas que te di, son como la energía o los recursos de tu vida; los puedes gastar en enfocarte en todo lo que no te gusta y a tu juicio podría ser diferente. O puedes elegir enfocarte en lo que quieres, en lo que te gusta, en lo que valoras, en lo que sueñas, no en lo que temes. Enfocarte en lo que has logrado, no en lo que te falta.
Si piensas en tus miedos, crearás tus miedos. Si piensas en tus sueños, los harás realidad. La vida hijo mío, te da los recursos para hacer y vivir lo que quieras, y tú puedes usarlos para crear lo que quieres o lo que no quieres. Si te enfocas en lo que no quieres, cuando despiertes, te habrás perdido de disfrutar mucho de lo que realmente quieres para tu vida.

Autor Desconocido


Proverbios 3:13-17
Bienaventurado el hombre que halla la sabiduría, y que obtiene la inteligencia; Porque su ganancia es mejor que la ganancia de la plata, y sus frutos más que el oro fino. Más preciosa es que las piedras preciosas; y todo lo que puedes desear, no se puede comparar a ella.
Largura de días está en su mano derecha;en su izquierda, riquezas
y honra. Sus caminos son caminos deleitosos, y todas sus veredas paz. Ella es árbol de vida a los que de ella echan mano, y bienaventurados son los que la retienen.

¿EN QUE ESTA PUESTA TU CONFIANZA

Salmos 20: 7 “Estos confían en carros, y aquéllos en caballos; Mas nosotros del nombre de Jehová nuestro Dios tendremos memoria”.

Hay momentos de flaqueza en la vida cristiana, todos hemos pasado y seguiremos pasando por momentos de flaqueza espiritual, esos momentos en los cuales pareciera que ninguna palabra cala en nuestra vida.

En esos momentos de flaqueza espiritual nuestra fe es debilitada y nuestra confianza quiere ser desviada hacia otra cosa que no es Jehová de los Ejércitos.

Posiblemente tu estas pasando por situaciones difíciles en tu vida, en donde no encuentras una solución. A lo mejor estas pasando una de esas batallas en las cuales nuestra fe es debilitada. Quizá alguien te dijo: “¿Dónde esta tu Dios?” por que ha visto que todo te esta saliendo mal.

Muchas personas confían en sus buenas capacidades para salir adelante en la vida, otros confían en que su dinero no les permitirá pasar problemas, otros confían en el hombre, creyendo que si determinada persona esta con ellos, no hay de que preocuparse. Pero mas allá de lo terrenal existe otro ámbito, ese ámbito que no se puede observar con nuestra vista humana, ese ámbito llamado Fe, esa Fe que depende de alguien verdadero, de alguien que es el único camino, de alguien que es la vida, de ese alguien que se llama Jesús.

Posiblemente estés rodeado de muchas adversidades y al mejor tu mente no encuentra una salida, pero quiero decirte que si tu Fe esta puesta en Jehová nuestro Dios, no hay de que temer. Pueden levantarse olas gigantes, tempestades fuertes pueden venir contra ti, mares anchos pueden estar frente a ti, murallas pueden quererte detener, pero si tu confías en Dios nada de eso te podrá hacer frente.

Tienes que entender que muchas veces estamos en circunstancias difíciles porque no hemos entendido de que si deposito mi confianza en Dios, El me cuidara, el me protegerá, así que no hay de que temer. La gente puede confiar en carros y otros en caballos, pero nosotros confiamos en el único Camino Verdadero que da Vida.

Amigo mío, no temas, no te amedrentes, si confías en Jehová de los Ejércitos tendrás la victoria de la vida. Ahora bien, ¿En quien confías?, ¿En que esta puesta tu confianza?, es momento de entender que si has estado confiando en otra cosa que no sea el Señor he estado mal. Por esa razón necesitas urgentemente comenzar a confiar en aquel que es el único que te puede dar una victoria real.

Confía en Jehová de los Ejércitos, pues El jamás ha perdido una sola Guerra.