lunes, 17 de marzo de 2008

CAMINOS

Señor, ¿no me das la mano?
¿No ves? Me estoy hundiendo
en el cieno del pecado.

Llegué tarde, lo sé, me entretuve
por ese camino andando.
Camino, mejor caminos,
¡hay Señor, anduve tantos!

Anduve por aquel que parecia lucir,
lienzo de nubes de color blanco
y eran nubes de polvo, polvos sucios.
Los ojos de la carne me han engañado.

Caminé con pie firme en el otro,
altiva la cabeza, y encumbrado.
Pero cedio a mis pies todo el camino.
Era Señor, mi orgullo tan pesado,
y el otro iluminado por las velas, los lirios,
las liturgias y los cantos.

Cuando pasé por él, no hubo mas voces.
Las velas y los lirios se apagaron.
¡Como engañan los hombres, Señor mio!
¡Cuantos falsos caminos me indicaron!

Caminé lejos y conté mis pasos.
Miro a mis pies y estoy desalentado.
No moví un paso en este lodo inmundo.
¡Señor, Señor, estoy hundido en el pecado.

Y que será de mí cuando ya sienta
que el fango va subiendo despiadado,
me cubra el pecho y entre en mi garganta,
y se apague mi voz y el fin haya llegado.

¡Hay que será de mí, Señor, Señor!
¿Me escuchas?, perdido estoy
si no me das la mano. Quizas tampoco tú
sacarme puedas. Quizas soy yo que tarde
te he buscado.

¡Pero mira Señor, mira!, ¿no ves?
¿No ves mis ojos? Estan humedos.
¿Ves?se han mojado. ¿Ves como golpean
aqui dentro? Mi corazón tambien está llorando.

¡Soy yo, Señor!, yo soy que me arrepiento,
del lodo en que yo mismo me he ensuciado,
de andar por los caminos que me han dicho,
de volverte la espalda Dios amado!

Te dije.... Te dije, Amado. ¿Ves Señor?
Te quiero, te dije Amado. ¿Ves Señor?
Te amo, y lo dije con voz que era un sollozo.
Lo dije de rodillas y temblando.

Quiero estar junto a ti, no quiero lodo.
Quiero tu firme amor, no quiero fango.
No tengo nada, ni me quedan fuerzas.
Mas viviré si tu me das la mano.

¡Señor, Señor! ¿no me respondes?
Mas presiento que ocurrira tal vez
algún milagro. Las lagrimas dejaron ya
mis ojos, mi corazón cesó con su quebranto.

¡Señor, Señor! ¿no me respondes?
Y parece como si un viento suave
y perfumado, acariciara con amor mi rostro.

¡¡Señor!! ¡Mira, Señor!, ya no hay mas barro!
Ya puedo caminar con paso firme.
Ya no se mueve el suelo con mis pasos.
Ya no hay lodo que ensucie mas mi vida.

Tú solo me sacaste de este fango.
¡Señor, me diste la mano! ¿no ves?
Jamás he de hundirme en el cieno del pecado.
Porque, limpiaste con sangre,
ese camino de barro.

¿A QUIEN IREMOS?

¿Quién es digno de salvarse
en una sociedad tan cruel
si se denigran a los hombres
y se maltrata a la mujer?
Unos pocos con sus leyes
se reparten el botín
mientras pobres y excluidos
ven pasar el gran festín
Nuevos muros se levantan
se divide la ciudad
todos viven a la sombra
de una gran desigualdad
¿Quién pagará el precio
de la reconciliación,
si se vende por monedas
cualquier acto de amor?
El pueblo dividido
no sabe adonde ir
solo escucha voces
de esclavizarse y resistir
Jesús con su propuesta
nos viene a salvar
El nos dice que la vida
es ofrenda de unidad.

RECONOCER SU VOZ

Y dime amiga... ¿Cómo sabes que Él te habla?
¿Cómo reconoces Su Voz entre tantas voces,
tantos ecos, tanto ruido?...

Es que... LE AMO
y hemos pasado tanto tiempo juntos
que incluso antes de que empiece a hablarme
mis ojos le buscan, pues sé
que tiene algo que decirme.
A veces es una leve frase
y otras... una profunda conversación.

Pero dime amiga... ¿Qué hace diferente Su Voz?

Es sencillo... Su Fidelidad
y que Sus Palabras son Verdad
Mis ovejas oyen mi voz,
y yo las conozco,
y me siguen. (Juan 10:27)

Mas dime amiga... ¿Qué hace especial Su Voz?

Una pregunta: ¿Has amado alguna vez?
¿No te quema el corazón la pasión?
¿No ardía nuestro corazón en nosotros,
mientras nos hablaba en el camino,
y cuando nos abría las Escrituras?
(Lucas 24:32)

Perdona que insista, amiga…
hay otros que buscarán tu amor y tus favores
y te hablarán para conquistarte…
¿Qué tiene Él mejor que estos?

Yo soy de mi Amado, y mi Amado es mío
(Cantares 6:3)
Ponme como un sello sobre tu corazón,
como una marca sobre tu brazo;
Porque fuerte es como la muerte el amor;
Duros como el Seol los celos;
Sus brasas, brasas de fuego, fuerte llama.
Las muchas aguas no podrán apagar el amor,
Ni lo ahogarán los ríos.
Si diese el hombre todos los bienes de su casa por este amor,
De cierto lo menospreciarían.
(Cantares 8:6-7)

MENSAJE URGENTE

Quiero dirigirme a tí - Con mensaje muy urgente
Que Cristo puede salvarte - En salvación permanente.
Salvación presente y eterna - Que es que Cristo ha ganado
Muriendo en la cruz por tí - Por tu mal, por tu pecado
Dándote la libertad - Del presente y del pasado
En perspectiva eternal - De un futuro esperanzado.

Tan cierto como Él dice, - En amor inmensurado
El que por mí entrare al Padre - De cierto será aceptado.

¿Por qué no has de tener tú - esta certidumbre interna
De salvación y de paz - De gozo y de vida eterna?
Si Cristo murió por tí - y resucitó en victoria
Pagando a Dios tu rescate - En su muerte expiatoria.

Tú no puedes hacer nada, - Y ya no tienes excusa
En tu condición humana,
Con razón Satán te acusa.
Sólo tienes que acudir - A Cristo en este momento
y aceptar su salvación
Tendrás paz, tendrás contento
Y gozarás de la dicha - de una salvación completa
Que perdura eternamente - con Cristo y en su presencia.
Y ya la vida para tí - tendrá un sentido precioso
Lleno de gozo y paz - con un porvenir hermoso.

APOSTOL



El apostol Bote dela igesia madre de Caanan, predicando en la iglesia anterior de La Paz.