viernes, 4 de enero de 2013

jueves, 3 de enero de 2013

UN SOLO CORAZÓN PARA LOS DOS

Los síntomas eran claros e inequívocos, y los médicos no se hicieron ilusiones. El cuerpo de Donna Ashlock, de diecisiete años, empezaba a rechazar el corazón de Félix Garza, de quince, implantado en ella tres años antes. A la muchacha la llevaron al hospital y la pusieron en cuidados intensivos. Pero la naturaleza respondió negativamente, y Donna murió el 7 de marzo de 1989. Durante tres años ella había vivido con el corazón de Félix. Dos personas, dos seres, dos vidas jóvenes: un solo corazón.
He aquí el ideal de todo noviazgo, de todo matrimonio. Dos vidas, dos personas, dos voluntades, pero un solo corazón. Un solo corazón para tener los mismos sentimientos, sufrir las mismas penas, gozar las mismas alegrías.
Félix murió de un aneurisma cerebral. Presintiendo su muerte, había donado su corazón a Donna, que lo necesitaba. Donna tenía catorce años, y vivió tres años con el corazón de Félix.
¿Qué hace que un matrimonio sea estable y duradero? El amor. ¿Cómo se fundamenta el buen amor? Cuando ambos corazones, el de él y el de ella, laten al unísono. ¿Cómo hacer que ambos corazones latan juntos? Ese es el gran secreto de un matrimonio duradero, estable y feliz. ¿Cómo se logra eso? La palabra clave es «compromiso». Esos votos que uno y otro se hacen ante el clérigo, los testigos y Dios, tienen que ser más que sonidos y articulaciones. Tienen que estar fundamentados en un compromiso, una lealtad, una unión de por vida. No puede haber siquiera la posibilidad de separación o divorcio. El compromiso es la clave. Él jura lealtad y amor eterno a ella, y ella jura lealtad y amor eterno a él.
Creemos que todo matrimonio comienza con esos ideales, pero algo pasa: enfriamiento, hastío, disgusto y, a partir de ahí, peleas e infidelidades, y al final el divorcio.
¿Qué ha ocurrido en los matrimonios fracasados? Para responder a eso hay que apelar a lo espiritual. El salmista dijo: «Si el Señor no edifica la casa, en vano se esfuerzan los albañiles» (Salmo 127:1). Es que los cónyuges hicieron caso omiso del gran edificador de hogares.
Si Dios no es el centro de nuestra vida y de nuestro hogar, fracasará nuestra familia. Cristo está a la puerta de nuestro matrimonio y nos pide que le permitamos entrar. Abrámosle hoy la puerta de nuestro corazón y de nuestro matrimonio.

Hermano Pablo

martes, 1 de enero de 2013

 Aqui mi guapa Apostol posando para la foto.
 Mi Aposstol  Elena haciendo la presentación de la predicación.
Mis Apostoles Falin Elena en presntación de un niño a Dios, para que sus padren lo gien en el camino de Dios y a sin cuando sea grande no se aparte de El.

sábado, 29 de diciembre de 2012


TIEMPO DE REFLEXION

El último mes del año trae consigo la paradójica necesidad de reflexionar en medio del caos de las actividades que finalizan, el apuro por terminar lo que queda pendiente, las reuniones, los festejos, etc.

La mirada retrospectiva nos muestra cuán distantes o cercanos hemos quedado de lo que habíamos pensado o planificado para este año.

Vemos lo que hemos transitado: lo difícil de algunas situaciones nos asombra y visto más tarde nos parece increíble… También los momentos de felicidad y plenitud, algunos acontecimientos especiales nos llenan el pecho de calidez y la sonrisa se dibuja automática en nuestro rostro…

Las pruebas y las bendiciones, todo sale de la mano de nuestro Dios y nada escapa a Él. Aquello que nos da forma y transforma y aquello que por gra cia nos es dado.

Y la huella de nuestro Señor se hace patente al lado de nuestros pasos dados… Su mano sosteniendo nuestro cuerpo cansado; sus caricias que llenaron de paz nuestra mente cuando la lógica y los porqués sin respuesta inundaban el pensamiento; sus palabras que dieron sentido a nuestra vida.

“Nuestra alma espera en Jehová; nuestra ayuda y nuestro escudo es él. Por lo tanto, en él se alegrará nuestro corazón, porque en su santo nombre hemos confiado. ¡Sea tu misericordia, Jehová, sobre nosotros, según esperamos en ti! “. (Salmo 33:20)


¡Llenemos de gozo de saber a Dios en nuestra vida! ¡Llenemos de gozo y alegrémonos al contemplar la misericordia de nuestro Padre!

¿Sabemos de Dios en nuestras vidas o hemos olvidado que caminamos su camino?, ¿acaso hemos trazado un camino paralelo al que nos ha preparado según lo que nosotros esperamos de nosotros mismos?

Miremos otra vez lo transit ado. Reconozcamos Su Presencia a pesar nuestro y alegrémonos de su misericordia.

Y en este nuevo año, caminemos por las huellas que Jesús ya trazó. Esperemos en Dios con la convicción de que Él hará.
Equipo de colaboradores del Portal de la Iglesia Latina
www.iglesialatina.org
meryrueda

sábado, 22 de diciembre de 2012

DIOS NO SE OLVIODA DE TI

 
Sientes que tu clamor no ha sido escuchado y que ya es demasiado tarde para remediar la
situación que ahora enfrentas; has orado y nada; la respuesta no viene y aparentemente las
esperanzas están totalmente perdidas. Pero una vez más, Dios te recuerda que a lo largo de
tu vida, es Él quien te ha venido abriendo caminos donde tu creías que ya no había posibilidades;
y que así como lo hizo en el pasado, también lo puede hacer actualmente, no porque
lo merezcas sino por su pura misericordia.
Dios es capaz de mover circunstancias naturales o personales, aunque en este momento no
entiendas por qué suceden; es capaz de hacer cambios radicales y favorables que te permitan
avanzar en contra de toda especulación. Es Dios quien te abre caminos donde no los hay.
Todo lo que está sucediendo hoy es para que aprendas a depender de Él, aunque las esperanzas
estén totalmente perdidas, aunque haya expirado el plazo que te diste para la solución
de tu problema; mientras tanto no reniegues, no temas ante lo que pueda venir, pues
al final comprenderás que todo es para tu bien.
Ignora las voces de todos aquellos que quieren desmotivarte, que quieren destruir tu fe,
que te aseguran hoy que todo está perdido, que ya no hay nada más que hacer.
Pon en las manos de Dios todas las áreas de tu vida, si lo haces, las adversidades no te afectarán,
porque Su presencia continua estará velando y obrando a tu favor. Nada sucederá
por casualidad, todo tendrá un propósito. Dios tiene una forma de actuar, muy distinta a la
nuestra, como así también tiene su propio tiempo, Su poder es capaz de operar profundas
transformaciones aún más allá de nuestra lógica.
Así es, aunque todo parezca terminar contigo y por el momento no vislumbres ninguna
perspectiva, espera y soporta todo aquello que parezca demoledor para tus ilusiones. Tu
situación cambiará, no como la imaginaste, sino mucho mejor.
Para Dios, el tiempo es imprescindible para que puedas desarrollar: fe, templanza, paciencia
y capacidades, para que tengas la firme convicción de que sin Él no podrás ir a ninguna
parte, ni hacer absolutamente nada. Nunca es tarde, aún cuando veas que el tiempo pasa y
no hay respuesta.
«Descansa en Dios y en Sus promesas, hoy tu vida puede ser un calvario, pero muy pronto vas
a sonreír y verás que el ayer fue necesario para disfrutar el presente, porque Dios no se olvida
de ti»

jueves, 20 de diciembre de 2012

«SALÓN DE VÍBORAS»

Ocurrió en el club nocturno llamado «Salón de víboras» en la calle Sunset, es decir, «Puesta de sol», de Hollywood, California. Era una de esas fiestas donde abundan el alcohol, el tabaco, la música rock y bellas muchachas.
Al ritmo de la música y en medio de bamboleos y contorsiones, las muchachas se iban quitando poco a poco la ropa. Entre los asistentes a la fiesta se hallaba River Phoenix, un promisorio joven actor de cine.
De pronto, como herido por un rayo, River cayó al suelo en convulsiones incontrolables. Siendo la estrella de la fiesta, muchos lo rodearon tratando de ver qué hacían por él, pero los espasmos eran muy fuertes y, en cuestión de minutos, River quedó como muerto. Al llegar el auxilio médico se comprobó que, en efecto, River había pasado de esta vida. En el «Salón de víboras» de la calle «Puesta de sol», River halló el ocaso de su vida.
El suceso conmovió a toda la comunidad artística de Hollywood. River Phoenix había hecho ya cuatro películas. Iba subiendo rápidamente la escalera del éxito. Pero frecuentaba clubes nocturnos de fama cuestionable, y se sabía que usaba drogas. A eso se atribuyó su muerte.
Los nombres aquí son simbólicos. El nombre del club, «Salón de víboras», es una fiel descripción de las ondulaciones del humo del tabaco y del sumo del alcohol y de las drogas que llenaban el oscuro ambiente del lugar. Y la calle donde está situado, Sunset, resultó ser, cuando menos para River Phoenix, la puesta literal y terminante del sol de él.
Lo triste es que son miles los jóvenes que sucumben diariamente al llamado de esa vida. Estos jóvenes creen que están disfrutando de la plenitud de su juventud y hacen gala de su libertad, pero están bailando la danza de la muerte con víboras. Creyendo estar en el amanecer de su vida, están más bien acercándose a su ocaso. ¡Qué lástima que se tenga que desperdiciar la gloria y el porvenir de la juventud en muchachos que todavía no han aprendido a vivir!
Cristo le ofrece a todo joven una vida mejor. Él no le ofrece un «Salón de víboras». Él le ofrece una vida íntegra, recta, justa y feliz, una vida que el mundo no puede dar porque no la conoce.
Y Cristo no ofrece ningún ocaso. Él ofrece una mañana gloriosa, llena de luz y esperanza. Permitamos que Cristo sea el Señor de nuestra vida. Con Él estaremos libres de víboras y de puestas del sol. Con Él seremos eternamente felices.

Hermano Pablo