lunes, 26 de enero de 2009

ES EXTRAÑO, ¿NO TEPARECE?

“El rey David dijo a Arauna: No, la comprare por su precio, porque no ofreceré a Jehová mi Dios, holocausto que no me cueste nada. Y compró David la era y los bueyes por cincuenta ciclos de plata” 2 Samuel 24:24

¿No te parece extraño cómo un billete de
$20.00 “parece” tan grande cuando lo
llevas a la Iglesia, pero tan pequeño
cuando lo llevas a un centro comercial?

¿No te parece extraño cuan larga parece una
hora cuando oímos de DIOS,
pero cuan corta cuando un equipo juega
fútbol por “solo” 90 minutos?

¿No te parece extraño que larga parece una
hora cuando estas en la Iglesia,
pero que corta es cuando estas
divirtiéndote en algún lugar?

¿No te parece extraño cuánto nos
emocionamos cuando un juego de fútbol
se extiende tiempo suplementario, pero
nos quejamos cuando el culto es
un poquito más largo que lo usual?

¿No te parece extraño lo difícil que
es leer un capitulo de la Biblia, pero
que fácil es leer 100 paginas de
cualquier revista popular?
¿No te parece extraño cómo las personas
desean los asientos del frente en
cualquier juego o concierto, pero
cuánto se esfuerzan por buscar los
asientos de atrás en las Iglesias?

¿No te parece extraño que
necesitemos 2 o 3 semanas de aviso
para incluir un evento de la Iglesia en nuestra
agenda, pero podemos ajustar nuestra
agenda para otros eventos en el último momento?

¿No te parece extraño lo difícil que
es aprender una verdad simple del
Evangelio para compartirla con otros,
pero que fácil es para las mismas
personas entender y repetir un chisme?

¿No te parece extraño cómo creemos
rápida y fácilmente lo que dicen
los periódicos, pero cuestionamos
lo que dice la Biblia?

¿No te parece extraño que todos
quieran ir al cielo, siempre y cuando
no tengan que creer, o pensar, o decir,
o hacer alguna cosa que requiera esfuerzo?

¿No te parece extraño cómo podemos
enviar miles de chistes por correo
electrónico y se esparcen como
reguero de pólvora, pero cuando
empezamos a enviar mensajes acerca de DIOS,

la gente lo piensa dos veces antes de
compartirlos con otros?

¿ES EXTRAÑO, NO TE PARECE?…..

¡Dios te bendiga!

Amén

HOY..ÉL ME LIBRARA DE LA MALDAD

“Líbrame de homicidios, oh Dios, Dios de mi salvación; y cantará mi lengua tu justicia” Salmo 51:14
Cada vez que leo el Salmo 51 veo en esa confesión solemne como David nombra su pecado sin ponerle ninguna agradable etiqueta. Él lo llama homicidio, el no habla de imprudencia, de falla humana o de trampa del diablo. David lo señala como Homicidio. Aunque él no mató por su propia mano al esposo de Betsabé, sin embargo si lo planificó, él organizó todo para que el esposo de ella muriera.
Hoy aprendo de David que lo que necesito para ser victorioso llamar mis propios pecados por su nombre. Aprendo a no darle nombres justos a los pecados sucios; porque aunque les ponga etiquetas agradables , estos pecados no cambiarán su olor, seguirán emanando nauseabundos olores. Dios ve mis pecados tales como son y que es lo que él espera de mi? Él espera de mi que también los vea como son.
En el salmo 51 yo encuentro que David se oprimió realmente con la oscuridad de su pecado. Es fácil usar palabras, pero es difícil sentir su significado. El Salmo 51 es la fotografía de un espíritu contrito y humillado. Allí vemos a David con el espíritu quebrantado. Yo puedo decir palabras como las de David y no sentir el dolor dentro de mi. No es asunto de palabras buenas sino de espíritu correcto detrás de las palabras. De que sirven las palabras correctas, si mi corazón no está consciente del infierno que existe detrás de esas palabras? Si es así jamás podré esperar recibir el perdón tan necesitado.
El Salmo 51 es la oración sincera de un pecador arrepentido y hoy quiero tener ese mismo espíritu. Esa oración se dirige al Dios de la salvación, porque es su prerrogativa perdonar. El verso 14 lo llama Dios de mi Salvación, porque cuando camino por el sendero de la cruz yo me puedo regocijar en que aún él es Dios de mi salvación. Y finalmente hoy quiero terminar como el salmista con un voto meritorio. Cantará mi lengua tu justicia, si porque nosotros debemos cantar al trabajo terminado de un Salvador precioso y quienes somos perdonados por él, terminamos cantando a la justicia de él.
Señor, Gracias por enseñarme a ser honesto. Gracias por enseñarme a llamar mi pecado por su verdadero nombre. Hoy quiero ser honesto y pedirte que me libres de mis maldades y de mis homicidios. Si Señor, yo no puedo seguir llamando el pecado como si fuera algo simple. Ayúdame a mirar el pecado como pecado y llamarlo como debe ser llamado, porque solo así podré ser libre de todo lo que quiere encerrarme y alejarme de ti. Gracias por tu amor oh Jesús. Amén.

.COLUMNAS DE PIEDRA

Oculto en el desierto de Chihuahua en Nuevo México se encuentra una de las grandes maravillas de Dios: las Cavernas de Carlsbad. Al visitante casual, si oscura entrada le puede parecer poco interesante, como el estéril desierto que las rodea. Sin embargo, allí hay delicadeza y grandeza, ese es un lugar en el que a través de los siglos pequeñas gotas de agua, silenciosas en la oscuridad, han construido un monumento de extraordinaria belleza de quince metros de altura. Gota tras gota, depositando partícula, un dedo que parece de mármol comienza a crecer. Al final, este proceso forma una enorme columna; así, se crean las esculturas dentro de las cavernas.
Un proceso similar ocurre dentro de cada uno de nosotros. Cuando un solo pensamiento llega a nuestra mente, deja sedimento que entra a lo más profundo de nuestra alma, formando nuestras propias columnas… columnas de carácter. Si permitimos que los pensamientos inmorales, egoístas y violentos llenen nuestra mente, formamos columnas de mal y fracaso. Si llenamos nuestra mente con la verdad y el amor, formamos columnas fuertes y bellas dentro de nuestra alma.
En Proverbios 23:7, el rey Salomón dijo: Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él.
Salomón entendía que las cosas en que pensamos determinan la persona que llegamos a ser. Cuando buscamos a Dios, comenzamos a reflejar su carácter en nuestra vida.
¿Qué formaron las columnas de carácter en tu vida? ¿Te asemejas en algo a tu Padre Celestial?
Tú puedes llegar a ser la persona que Dios diseñó para que seas al renovar cada día tu mente con la Palabra de Dios. Al igual que las Cavernas de Carlsbad se crearon a través del tiempo, ocultas de la vista, así se forja nuestro verdadero carácter.
Filipenses 4:8Por último, hermanos, piensen en todo lo verdadero, en todo lo que es digno de respeto, en todo lo recto, en todo lo puro, en todo lo agradable, en todo lo que tiene buena fama. Piensen en toda clase de virtudes, en todo lo que merece alabanza.

UNA BRECHA ENLA MURALLA

Lectura: Nehemías 4:7-18
Los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene[n] del Padre. —1 Juan 2:16
La Gran Muralla China, de 7.600 kilómetros de largo, fue construida para mantener fuera a los invasores del norte. El primer emperador de China, Shi Huangdi, quien vivió entre 259 y 210 a.C., construyó la primera muralla. Pero en 1644 d.C. los manchúes penetraron la Gran Muralla e invadieron China. Lo hicieron sobornando a un general de la dinastía Ming para que abriera las puertas.
Durante la reconstrucción de la antigua Jerusalén, Nehemías entendió el agudo peligro que representaban aquellos que se oponían a la reconstrucción de los muros derruidos de la ciudad. Así que ordenó una vigilancia constante. La mitad de los trabajadores debían mantener la guardia mientras que la otra mitad reconstruía los muros (Nehemías 4:13-18).
Como cristianos, debemos ser vigilantes para que nada haga una brecha en nuestras defensas espirituales. Ni siquiera el más maduro de los creyentes jamás puede darse el lujo de bajar la guardia.
El apóstol Juan nos advierte de los enemigos desde tres direcciones. Los identifica como «los deseos de la carne, los deseos de los ojos y la vanagloria de la vida» (1 Juan 2:16). Estos enemigos nos atraen alejándonos de Dios y Su Palabra, y dejando un espacio abierto para que el enemigo se cuele.
Estemos alertas a lo que nos seduce hoy. Un desliz abre la puerta al pecado, lo cual a su vez puede que se transforme en un hábito que nos sojuzgue. No permitas una brecha en la muralla. Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre. —1 Juan 2:17

domingo, 25 de enero de 2009

HOY..EL SEÑOR ENVIARA ANGELES CERCA DE MI

“Porque esta noche ha estado conmigo el ángel del Dios de quien soy y a quien sirvo” Hechos 27:23
Gran tempestad y profunda oscuridad, acoplada con el riesgo inminente de un naufragio había llevado a la tripulación del barco a un ambiente muy triste y desesperado. Mientras toda la tripulación se agitaba interna y externamente ante tan grande tempestad, uno de los tripulantes se encontraba tranquilo, reposado y no estaba ni sacudido por dentro ni sacudido por fuera y cuando sus labios se abrieron sus palabras de esperanza transmitieron a todos los demás una inmensa quietud.
Pablo era él hombre quieto en medio de una tripulación altamente desesperada. Había legionarios romanos en la plataforma exterior del barco y un pobre preso judío tuvo más espíritu que ellos en tan difíciles momentos. Por qué? Porque él tuvo un amigo oculto quién le impartió coraje. El Señor Jesús envió un mensajero para él a fin de que le susurrara un mensaje de consuelo en el oído de su siervo fiel, por lo tanto el se vistió de ánimo y pudo hablar con gran facilidad.
Si nosotros tememos al Señor, podemos estar seguros que no estaremos solos en los momentos difíciles. Los ángeles del Señor están reservados para ministrarnos y ellos no son retrocedidos por las tormentas ni impedidos por la oscuridad.
Las visitas de los ángeles no son escuetas ni escasas, sus visitas son frecuentes en nuestras noches de tempestad y de conflicto. Ellos bajan como amigos cuando estamos bajo presión y sus intercambios con nosotros son abundantes y grandes sus fortalezas de amor. Sus palabras de ánimo traídas a nosotros desde la escalera de Jacob reaniman nuestro espíritu. Si esta es una hora de angustia para ti, entonces prepárate para discernir la Ministración de los ángeles de una manera muy especial. Hoy quiero estar dispuesto a responder a ellos con esperanza y amor.
El ángel del Señor trajo para Pablo un mensaje de esperanza. Dios enviará para mi en este día también mensaje de esperanza, puede ser directo a mi corazón, o a través de su Palabra, o por medio de un hermano y si es necesario él enviará para mi un ángel para reanimarme. Hoy puedo creer con toda la seguridad de que el ángel del Señor está cerca, en medio de la oscuridad para traer tranquilidad a mi alma en medio del temor. Los rugidos fuertes el salvaje mar tratan de quitarme la paz , más tu presencia Señor a través de tu ángel me confortará. Y solo en ti oh Señor podré esperar.

Señor, Gracias por la fortaleza de tu presencia. A veces siento que casi no puedo, pero en medio de tu amor yo encuentro paz. Gracias por tus ángeles que acampan alrededor de los que te temen y los defienden. Se que soy uno de los que te temen y por ello mi alma está acallada en ti. Sostén mi alma con tu fuerza y ayúdame a caminar con la paz que viene de lo alto. Amén.

UN MILLON DE SAPOS

Muchos se angustian por problemas que, en su mayoría, nunca llegan a hacerse realidad. Sufren con anticipación, pensando e imaginando cosas que pudieran suceder. La mayoría de nuestras preocupaciones se deben a la falta de confianza en Dios.
Un hacendado fue a la ciudad y le preguntó al dueño de un restaurante si podía utilizar un millón de piernas de sapos. El dueño del restaurante quedó asustado y quiso saber dónde pretendía el hacendado conseguir tantas piernas de sapos. El hacendado le respondió: Cerca de mi casa hay un pequeño lago que está invadido e infestado de esos bichos. Son millares y hacen un barullo infernal, croando toda la noche. ¡Me estoy volviendo loco!
Quedó decidido, entonces, que el hombre le traería quinientos sapos por semana, durante algún tiempo. En la primera semana, el hacendado volvió al restaurante un poco avergonzado, pues traía en sus manos dos sapos. El comerciante le preguntó: ¿Dónde está mi pedido?
El hombre respondió: Yo estaba totalmente engañado. ¡Había solo estos dos pequeños sapos en el lago! Ellos solos son los que hacían todo el barullo.
La próxima vez que alguien te critique o se ría de ti, acuérdate de que no son miles de sapos los que hacen todo el barullo, sino apenas dos sapitos. Mientras dos critican y ríen, cientos te apoyan y animan.
Acuérdate de que las angustias y los problemas parecen mayores en la oscuridad. Hay una posibilidad muy grande de que, cuando llegue mañana y lo pienses mejor, el problema habrá disminuido su importancia o habrá desaparecido, quedando en su lugar un asunto de fácil solución.
Lo mejor es dejar las preocupaciones en las manos de Dios. Ten hoy un día feliz, sabiendo que Dios está en el control de tu vida.

Pero yo le cantaré a tu poder, y por la mañana alabaré tu amor: porque tú eres mi protector.Salmo 59:16

TIEMPO DE PLANTAR

Lectura: Gálatas 6:6-10
No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará. —Gálatas 6:7
En este preciso momento, en algún lugar en el mundo, algún agricultor está echando semillas en la tierra. Pronto esas semillas comenzarán a cambiar el lugar donde fueron plantadas. El suelo cuidadosamente preparado que hoy parece yermo se convertirá en un campo listo para la cosecha.
De igual modo, los buenos propósitos de año nuevo pueden ser semillas echadas para alterar el paisaje de la vida para los demás y nosotros mismos. Esta oración de San Francisco de Asís es un poderoso modelo de este anhelo de traer un cambio positivo a este mundo en sufrimiento:
Señor, has de mí un instrumento de Tu paz. Donde haya odio, déjame plantar amor; donde haya daño, perdón; donde haya duda, fe; donde haya desesperación, esperanza; donde haya tinieblas, luz; y donde haya tristeza, gozo.
El agricultor que siembra trigo jamás se sorprende cuando brota la espiga del suelo donde ha sido plantada. Así es la ley universal de la siembra y la cosecha: «No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará» (Gálatas 6:7). Nuestra naturaleza pecaminosa dice: «Complácete», mientras que el Espíritu nos insta a agradar a Dios (v. 8).
Hoy es tiempo de plantar. Dios ha prometido: «A su tiempo segaremos, si no desmayamos» (v. 9).

Siembra hoy lo que quieras cosechar mañana.